¿Recuerdan la tarjeta que les mostré la vez anterior? ¿Aquélla con una flor amarilla y pedazos de papel diseñado con los que me decidí a "experimentar"? Pues les cuento que el proyecto que hoy les traigo resultó de aprovechar parte de los restos de esa flor...
Al troquelarla y separarla de sus bordes, me quedé con este rectángulo de cartulina amarillo, que encontré súper lindo y perfecto para una propuesta minimalista, la que decidí a aplicar en la caja destinada al regalo que recibirá una amiga.
Casi lo mismo sucedió con el saludo cumpleañero. En aquella ocasión, probé a troquelarlo en papel diseñado; al no convencerme del todo (no era muy legible y preferí utilizar cartulina negra en mi tarjeta), lo hice a un lado y lo reservé para un proyecto futuro... Y me gustó tanto el "negativo" que quedó, que no dudé en incorporarlo a mi caja.
Nada mal, ¿cierto? Y, como ven, no hizo falta nada más para redondear el diseño, limpio, moderno y hasta con estilo... ¿Qué opinan ustedes? (o soy sólo yo la que me enamoro de lo que hago...:-)))
Ok, llegó el momento de despedirme. Aquí, ya empezó a hacer calor y quisiera aprovechar para lavar un poco y colgar la ropa en el jardín (gajes del oficio de ama de casa:-))... Entonces, les mando un fuerte abrazo y los dejo, hasta dentro de un par de días más... ¡Chau!
Productos: Stampin' Up!
Colores: Currygelb y Flüsterweiss.
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